Cada 25 de diciembre, en Zapote, inician las fiestas populares de la ciudad de San José, donde se llevan a cabo las corridas de toros más importantes de Costa Rica. A estas fiestas asisten cada año hombres y mujeres llamados toreros improvisados quienes regalan al público de forma espontánea su alegría y pasión. El redondel de las Fiestas de Zapote es el escenario donde Laisa, Pity y Cuchufleta no solo se encaran con el toro, sino que por medio de cada una de sus proezas en el ruedo, procuran definir su masculinidad. Es por esto que Pity (54), espera al toro desde hace 36 años en la puerta para encarar su destino. Es el lugar donde Patterson se transforma en Laisa con la esperanza de regalar alegría y luz al público mientras combate en la arena con sus emociones más oscuras. Y, es el escenario donde Cuchufleta, batalla por encontrar y creer en el amor. Es así como en Soy Improvisado, la actuación, la muerte y la soledad definen la lucha de estos hombres por una vida mejor dentro y fuera del redondel.